Direito e Mudanças Climáticas nos Países Amazônicos
O Projeto Direito e Mudanças Climáticas nos Países Amazônicos, coordenado pelo Instituto O Direito por um Planeta Verde tem como meta fomentar o desenvolvimento de instrumentos regulatórios relacionados às mudanças climáticas nos países: Bolívia, Brasil, Colômbia, Equador, Peru e Venezuela, integrantes do Tratado de Cooperação Amazônica. LEIA MAIS
19/11/2009
Sin avances concluyó convención de cambio climático; panorama negro para tratado post-Kioto.
¿Quién es culpable del caos climático? se preguntaba ayer un aviso que la organización Greenpeace instaló en una estatua de Cristóbal Colón situada en Barcelona, sede de la Convención de Cambio Climático.
Incertidumbre sobre reducción de emisiones de E.U. bloqueó negociaciones en Barcelona.
La convención que terminó este viernes era la última oportunidad para que los países ricos se comprometieran a reducir sus emisiones de gases de efecto invernadero antes de la Cumbre de Copenhague que se realizará dentro de 29 días.
Ni los cientos de relojes que activistas amontonaron en el piso, ni los cronómetros que, segundo tras segundo, indicaba el tiempo que falta para que inicie la Cumbre del Cambio Climático Copenhague (Dinamarca), pudieron evitar que los representantes de 192 países aceleraran los puntos de un acuerdo sobre el futuro del medio ambiente del planeta. El objetivo de las negociaciones es llegar a nuevo marco regulatorio para el 2012, que es cuando expira el Protocolo de Kioto.
Los cinco días que duró en Barcelona la quinceava y última Convención de Cambio Climático no bastaron para destrabar las tensiones políticas entre los países en vía de desarrollo (G77 + China), la Unión Europea y Estados Unidos.
Las expectativas por las acciones que el presidente estadounidense, Barack Obama, pueda sacar adelante son muy altas. A pesar de que el país firmó el Protocolo de Kioto (1997), nunca fue ratificado por el Congreso y se espera que para Copenhague el giro en las políticas de la Casa Blanca lleve a un compromiso del país más contaminante del mundo para que reduzca sus emisiones.
Jonathan Pershing, jefe de la delegación de E.U., aseguró que su país no quiere estar por fuera del acuerdo y que el "Congreso ahora reconoce la necesidad de avanzar". Sin embargo, no dio cifras sobre las metas de reducción de emisiones ni de financiamiento para los países en desarrollo sino que se limitó a hablar de la necesidad de "reducirlas radicalmente".
Todo depende de que el Senado apruebe una ley de cambio climático que están impulsando los demócratas. Esto se percibe como un estancamiento frente a los demás países industrializados que quieren ver que el contaminante más grande del mundo tome cartas en el asunto.
"Estados Unidos todavía no tiene ese asunto resuelto en casa, reconocemos que otros están esperando que demos números", agregó ayer Pershing, y recordó que hay un proyecto en la Cámara de Representantes prevé una reducción del 17% para el 2020 en relación con los niveles actuales y otro proyecto en el Senado que presenta un recorte de 20%.
Por otro lado, representes de la Unión Europea pusieron sobre la mesa el compromiso de bajar sus emisiones en un 20 por ciento en el 2020 (respecto al nivel de 1999), y dijeron se extendería hasta un 30 por ciento, siempre y cuando otros países industrializados tengan el mismo nivel de ambición.
"Si los temas sobre la reducción de los países industrializados y el financiamiento no son desbloqueados, creo que sin claridad en estos dos temas será muy difícil llegar a un resultado", le dijo Yvo de Boer, la máxima autoridad de Naciones Unidas en cambio climático, a medios latinoamericanos.
Según el Panel Intergubernamental de Cambio Climático, se requiere que los países industrializados reduzcan sus emisiones entre 25 y 40 por ciento para el 2020 con base en los niveles de 1990 para evitar los peores efectos del cambio climático (inundaciones, sequías, deshielo de los polos, etc). Incluso si esta meta es alcanzada, sólo hay un 50 por ciento de posibilidades para evitar consecuencias catastróficas.
En cuanto a financiamiento, De Boer agregó que los países desarrollados deben proveer al menos 10 mil millones de dólares a corto plazo para que los países en desarrollo puedan generar estrategias de adaptación al cambio climático y crecimiento económico más sostenible.
Según el organismo de la ONU, hubo progreso en temas de cooperación tecnológica, reducción de emisiones ocasionada por la deforestación en los países en vía de desarrollo y mecanismos para distribuir fondos. Sin embargo, se avanzó muy poco en los temas más importantes: reducción de emisiones de países industrializados y financiamiento para los países menos favorecidos.
"Sin estas dos piezas del rompecabezas en su sitio, no vamos a tener un acuerdo en Copenhague", dijo el secretario ejecutivo de la Convención de las Naciones Unidas para el Cambio Climático.
Fonte: El Tiempo/ Rebeca Lucía Galindo, de Barcelona