Sólo la capital del Japón consume la misma cantidad de energía que Suecia o Noruega.

Las grandes empresas y oficinas de Tokio están obligadas desde esta semana a reducir en un 6% sus emisiones de CO2, en un plan pionero en Asia para hacer de esta metrópolis de trece millones de personas un modelo contra el cambio climático.

Aunque Tokio sólo representa un 5% de las emisiones de dióxido de carbono del Japón, la entrada en vigor de esta norma en el corazón financiero del país es un símbolo de su compromiso medioambiental.

El gobierno de Tokio asegura que, de tener éxito, será el precursor de un proyecto nacional que podría elaborarse en el plazo de un año.

La normativa afecta a las grandes empresas y fábricas cuyo consumo de energía sea superior a 1,500 kilolitros de petróleo crudo al año, lo que abarca a oficinas, hoteles y hospitales con un espacio de unos 30,000 metros cuadrados.

La primera fase del plan se prolongará hasta abril de 2015: para entonces, las oficinas y comercios deberán haber recortado sus emisiones en un 8% respecto a los niveles de entre 2002 y 2007, y las industrias en un 6%.


Fonte: El Peruano/ Efe