Se prevé que la legislación incluya medidas para reducir en un plazo de 10 años las emisiones de gases contaminantes.


El senador demócrata John Kerry y el senador independiente Joe I. Lieberman dijeron que presentarán el miércoles próximo un proyecto de ley sobre energía y cambio climático, pese a haber perdido el único apoyo republicano en esa iniciativa.

Se prevé que la legislación incluya medidas para reducir en un plazo de 10 años las emisiones de gases contaminantes en un 17 por ciento con respecto a los niveles de 2005.

También incluirá la expansión de la exploración petrolera en aguas profundas, algo que apoyan el senador Lindsey Graham y otros republicanos, pero que mantiene divididos a los demócratas.

Kerry y Lieberman presentarán el proyecto de ley con dos semanas de retraso después de que Graham abandonase las negociaciones ante desacuerdos sobre otro asunto diferente, la reforma migratoria, que él impulsaba.

Graham propuso hacer una pausa en las negociaciones sobre la reforma energética hasta que ambos partidos superen sus diferencias en torno a la reforma migratoria y la futura exploración de petróleo en aguas profundas.

El legislador republicano puso en duda que la reforma energética se apruebe este año, al considerar que en el Congreso no hay un clima favorable para lograrla.

Sin embargo, Kerry y Lieberman emitieron un comunicado en el que expresaron optimismo de que lograrán los 60 votos necesarios para lograr la aprobación de la iniciativa en el Senado sin obstrucción de sus detractores.

Ambos senadores consideraron que el accidente reciente de una plataforma de British Petroleum en el Golfo de México ha dado un sentido de urgencia a esta legislación, cuyo objetivo es fomentar la independencia energética de EE.UU.

Según Kerry y Lieberman, "no podemos seguir esperando para resolver un problema que amenaza a nuestra economía, nuestra seguridad y nuestro medio ambiente".

Agregaron que la medida, que inicialmente debieron presentar el pasado 26 de abril, cuenta con un "creciente" apoyo de una coalición bipartidista conformada por el empresariado, grupos ecológicos y cívicos.

El derrame de crudo en el Golfo de México tras la explosión de una plataforma de BP el pasado 20 de abril ha complicado el debate sobre la reforma energética: tras el accidente, los demócratas de zonas costeras se oponen a más exploraciones petroleras pero los republicanos insisten en que es un elemento clave para la independencia energética.

En todo caso, la versión que salga del Senado tendrá que ser armonizada con la medida que aprobó en diciembre pasado la Cámara de Representantes.

El martes próximo, el Congreso realizará una audiencia para determinar las causas del accidente petrolero, y el secretario del Interior de EE.UU., Ken Salazar, debe presentar un informe al respecto para fines de este mes.


Fonte: El Espectador/ Efe